Dislexia, Disgrafía, Trastorno por Déficit de Atención, Trastorno por Hiperactividad, Trastorno del Espectro Autista… Seguro que os suenan estos términos. En los últimos años las dificultades de aprendizaje (DA) parecen proliferar, tanto en su clasificación como en su diagnóstico.
Estos trastornos pueden condicionar la adquisición del lenguaje en todas sus dimensiones: expresión oral y escrita, y comprensión oral y escrita. Por lo tanto es especialmente importante tenerlas en cuenta a la hora de guiar a los niños en el aprendizaje de idiomas.
De hecho, si se tratan adecuadamente no impiden que los estudiantes progresen en el aprendizaje de inglés y lleguen a su máximo potencial.
A continuación, podréis leer cómo tratamos las dificultades de aprendizaje en Capitol School y, además, os daremos tips (consejos) para ayudar desde casa.
¿Qué son?
Cuando hablamos de DA nos referimos a problemas de proceso de la información, con base neurológica, que interfieren con destrezas como la escritura, lectura o matemáticas, planificación, organización o razonamiento abstracto.
El hecho de tener una DA no significa que el niño o niña no pueda aprender tanto como el resto de compañeros, si no que se deberá, en la escuela y en casa, aplicar métodos específicos para compensar aquellos aspectos que suponen una dificultad.
¿Cómo las abordamos?
Como hemos mencionado antes, en el aprendizaje de idiomas en concreto podemos adoptar unas medidas metodológicas y estratégicas para que los alumnos con DA se sientan capaces y puedan alcanzar su máximo potencial.
Aquí van las 4 reglas de oro que aplicamos en nuestra escuela, algunas de las cuales podéis llevar a cabo en casa para ayudar a vuestros hijos en las tareas lingüísticas.
1. Refuerzo positivo. Para trabajar la autoestima del niño/a, conviene centrarse y potenciar aquellas actividades en las que destaca y se siente cómodo. Debemos alabar el trabajo bien hecho y tratar los aspectos de mejora desde un punto de vista positivo para evitar la frustración.
2. Dosificar la información. Si cargamos de trabajo al niño/a en el aspecto en el que más dificultades tiene, obtendremos el efecto contrario. En el caso del TDA, por ejemplo, priorizaremos tareas más cortas, que requieran pequeños períodos de concentración y que permitan pequeños breaks entre ellas. Conviene dar explicaciones cortas, breves y claras antes de empezar cualquier actividad. Esta simplicidad y brevedad de nuestras explicaciones es parte fundamental del Método Capitol ©.
3. Educar multisensorialmente. No todos aprendemos de la misma manera, por ello estimular varios sentidos a través de la diversidad en las actividades es muy importante: los recursos visuales y auditivos deben estar presentes en las clases y, además, podemos trabajar la respuesta física a través de actividades que requieran movimiento.
4. Trabajo en equipo. Aunque el estudiante debe ser capaz de trabajar por sí mismo, el aprendizaje cooperativo en el aula resulta especialmente positivo para los alumnos con dificultades de aprendizaje. En primer lugar, se crea un mejor ambiente de clase centrado en el compañerismo y, además, permite que los alumnos se ayuden entre ellos compensando sus carencias.
Existen, además, infinidad de recursos que podemos introducir en el día a día de nuestros hijos para reforzar sus habilidades de una manera positiva y lúdica. Os dejamos con algunas de ellas:
♦ Galexia Reading Fluency. Se trata de unaapp diseñada especialmente para los estudiantes con problemas de dislexia y que trabaja la ortografía y la escrituraa través del juego.
♦ Soyvisual. Esta app permite trabajar el desarrollo de todos los aspectos del lenguaje de una manera flexible y lúdica.
♦ Proyecto Emociones. En el caso del autismo, la educación visual y emocional a través de las nuevas tecnologías son de gran importancia. Con esta app las podremos trabajar.
♦ La máquina de escribir, de Tom McLaughlin. Este libro ilustrado aborda la dislexia y la creatividad y demuestra que las etiquetas no son importantes.
Así pues, las dificultades de aprendizaje no deben suponer un problema ni una etiqueta para nuestros estudiantes e hijos, sino que nos brindan una oportunidad para adoptar una mirada positiva, entender no hay dos personas iguales y que se puede aprender de muchas maneras.